La respuesta, de acuerdo a los estudios, es que sí. Las mujeres estamos mejor evaluadas que los hombres en 12 de 16 características de un liderazgo sobresaliente.
Los expertos en liderazgo y asiduos columnistas de Harvard Business Review, Jack Zenger y Joseph Folkman, realizaron análisis (2011 y 2019) de miles de evaluaciones (7,280 líderes) de 360 grados, en los que se consideró que en un 84% las mujeres son más eficaces y sobresalientes en las siguientes características: tomar la iniciativa, actuar con resiliencia, practicar el autodesarrollo, impulsar resultados y mostrar una alta integridad y honestidad. Por su parte, se calificó a los hombres como mejores solo en dos capacidades: «desarrolla una perspectiva estratégica» y «experiencia técnica o profesional».
Estas 16 características que componen un liderazgo sobresaliente y que han demostrado ser las más importantes para la efectividad de una líder, son resultado de 30 años de investigaciones realizadas por Zenger y Folkman.
En el cuadro 1 (2011), podrás observar la efectividad del liderazgo y las diferencias de puntuación entre mujeres y hombres. Un punto relevante a destacar es que entre más alta es la posición de liderazgo, más aumenta la diferencia percibida acerca de que las mujeres lideramos mejor que los hombres.
Efectividad del liderazgo por género y por posición. Cuadro 1.
| Posición | Mujer | Hombre |
| Top Management, Ejecutivos, Miembros Senior del equipo que reportan a la alta administración y supervisan a puestos gerenciales. | 67.7 | 57.7 |
| Gerentes | 56.2 | 48.90 |
| Gerentes en mandos medios | 56.2 | 49.9 |
| Supervisores, Gerentes de línea | 52.6 | 52.5 |
| Colaborador individual | 53.9 | 52.7 |
| Otros | 52.0 | 50.7 |
| Total | 55.1 | 51.3 |
Fuente: Zenger Folkman Inc., 2011
En el cuadro 2, puedes leer cuáles son las 16 características y su porcentaje distribuido entre hombres y mujeres.
Las 16 competencias que los liderazgos de más alto nivel desarrollan. Cuadro 2.
| Competencia | Hombres
% |
Mujeres
% |
| Toma iniciativa | 48 | 56 |
| Practica el autodesarrollo | 48 | 55 |
| Muestra alta integridad y honestidad | 48 | 55 |
| Impulsada por los resultados | 48 | 54 |
| Desarrolla a otros | 48 | 54 |
| Inspira y motiva a otros | 49 | 54 |
| Construye relaciones | 49 | 54 |
| Colabora y desarrolla trabajo en equipo | 49 | 53 |
| Establece e impulsa los objetivos | 49 | 53 |
| Defiende el cambio | 49 | 53 |
| Resuelve problemas y analiza los desafíos | 50 | 52 |
| Comunica de forma poderosa y abundante | 50 | 52 |
| Conecta al grupo con el mundo externo | 50 | 51 |
| Innova | 50 | 51 |
| Posee experiencia técnica o profesional | 50 | 51 |
| Desarrolla una perspectiva estratégica | 51 | 49 |
Fuente: Zenger Folkman., 2011
¿Por qué no hay más mujeres en altas posiciones de liderazgo?
El punto que más llama la atención, sin embargo, es que a pesar de que la percepción sobre el liderazgo femenino pareciera estar al alza, aún seguimos sin romper la barrera de acceso a las más altas posiciones dentro de las organizaciones. Porque de acuerdo a Zenger Folkman “Solo el 4,9% de los directores ejecutivos de Fortune 500 y el 2% de los directores ejecutivos de S&P 500 (Standard & Poors 500 índice bursátil considerado como el más representativo de la situación del mercado ) son mujeres. Y esas cifras están disminuyendo a nivel mundial.”
¿Dónde reside el problema por el cual las mujeres no acceden al mismo ritmo que los hombres a las más altas posiciones de liderazgo y poder? y ¿por qué este acceso al poder se mantiene prácticamente estancado y en algunos casos hasta ha retrocedido para el caso de las mujeres?
La respuesta de los expertos es que son los sesgos o prejuicios acerca de cómo lideramos las mujeres los que evitan que obtengamos posiciones de mayor poder y responsabilidad. Y, según su investigación, realizada en 2011 y repetida en 2019, el prejuicio que más afecta es la idea de que son los hombres los que, aún, tienen mayor capacidad para desarrollar una perspectiva estratégica por encima de las mujeres.
De acuerdo a los expertos, este prejuicio no es real; es decir que no está basado en el rendimiento que los liderazgos femeninos ofrecen. Sobre todo, cuando las mujeres son mejor evaluadas que los hombres en aspectos como impulsar resultados (54% mujeres / 48% hombres) y tomar iniciativa (56% mujeres / 48% hombres). Esta es una idea obsoleta que sigue estando presente a la hora de decidir si una alta posición es dada a un hombre o a una mujer.
Según Harvard Business Review, “es bien sabido que la gente tiene un sesgo a favor de preservar el statu quo; el cambio es incómodo. Así que debido a que el 95% de los directores ejecutivos son hombres blancos (en EE.UU.), el sesgo del status quo puede llevar a los miembros de la junta a preferir inconscientemente contratar a más hombres blancos para puestos de liderazgo.”
Liderazgo femenino, bueno para los negocios.
Sobre la importancia para los negocios de contar con más mujeres en posiciones de dirección, se ha investigado y escrito mucho. De acuerdo a la OIT (Organización Internacional del Trabajo), tres de cada cuatro empresas incrementan sus beneficios entre un 5% y un 20% cuando incorporan a mujeres en sus juntas directivas.
La información y los datos están disponibles. Contamos con estudios diversos realizados por universidades, organizaciones no gubernamentales, e instituciones financieras. El interés por impulsar el liderazgo femenino es real porque es necesario y además, un acto de justicia para mejorar la participación del 50% de la población global en los negocios y en las decisiones que nos afectan. También, las habilidades que demostramos las mujeres al liderar, son imprescindibles para el desarrollo de cualquier organización.
Tu universo de posibilidades es real
Independientemente de si quieres acceder a posiciones de liderazgo y poder o no, de si estás lista o aún no lo estás; es importante que sepas que tienes la posibilidad y las habilidades, en potencia, para llegar hasta donde te lo propongas.
El camino no es fácil. Tampoco es una ruta para todas.
Las mujeres que lo han recorrido, reportan que es duro y que aún necesitan demostrar y esforzarse más que sus pares hombres.
El punto de hoy, es que te sientas capaz, que reconozcas que el liderazgo femenino no es una frase bonita, sino, que es un hecho real y efectivo. Y el mundo, necesita de nuestros aportes, de nuestras visiones, diversas e incluyentes, para la transformación real.
El mundo y la vida de las sociedades, de las familias y de los negocios, no estará completo sin nuestro aporte.
Estamos listas para liderar. Y para creer que podemos, necesitamos ver a otras mujeres que ya lo han conseguido.
A continuación te comparto 9 características que he construído con diversos estudios y a lo largo de los últimos 4 años, acerca de nuestras habilidades para liderar, tanto en el mundo corporativo como en el emprendedor. Quizás no las tengas todas, o tal vez quieras desarrollar solo algunas. Hoy te las ofrezco para honrar tu universo de posibilidades, para que no olvides nunca que es vital alimentar tu fuego interior, ya que tu liderazgo empieza liderando tu propia vida.
- Orientación a las personas: Son sociables, expresivas y cercanas, lo que brinda mucho potencial a la hora de lograr compromisos, sea con los objetivos de la organización o en un proyecto en particular.
- Tendencia a la cooperación: Esto hace que el trabajo en equipo sea más natural, ya que ellas son activas en la inclusión y conteniendo a las personas. También se preocupan porque los procesos sean ordenados y sanos.
- Capacidad de actuar en muchas direcciones: Poseen la capacidad innata de pensar y actuar en muchas direcciones o temas al mismo tiempo. Esto les da una ventaja a la hora de tomar decisiones y enfrentar crisis.
- Conducción horizontal: El liderazgo femenino es inclusivo, alienta la participación y comparte el poder y la información con aquellos a quienes conduce. Tiende a crear y fortalecer las identidades de grupo.
- Predominio de lo emocional: En general se hallan capacitadas para tener en cuenta el lado “humano” de las personas y generar altos niveles de empatía.
- Mayor predisposición al cambio: Su estilo es innovador, con un firme sentido de la calidad, centrado en la persona, flexible, comunicativa y persuasiva.
- Comunicación: las líderes destacan por la asertividad y la escucha activa a la hora de trasladar un mensaje; habilidades fundamentales para garantizar que todos los interlocutores lo entiendan y cumplir con los objetivos.
- Capacidad de inspirar y motivar: las mujeres directivas presentan una sobresaliente capacidad de inspirar y motivar a los demás al favorecer un clima de confianza e integración.
- Poder de negociación: buscan el win-win en las negociaciones y promueven un debate colaborativo y participativo, muy necesario en la dinámica social y económica actual, que demanda líderes más solidarios, flexibles y cooperativos que miren más allá del mero interés económico.
Construído con las siguientes fuentes: Jack Zenger y Josepth Folkman de Leadership Development Consultancy y Harvard Business Review. Banco Santander y The London School of Economics. Jennifer Waling y Virginia McKendy: “Entrepreneurial Women: New Management and Leadership Models”.
Cuéntame, ¿con cuáles de estas características te sientes más identificada? ¿cuáles quisieras desarrollar? y ¿cuál sería un paso inicial para conseguirlo?
