“Como mujeres, no podemos escalar más alto de lo que estamos dispuestas a descender” señala la autora del libro “Manual para la mujer emergente” Mary Elizabeth Marlow, al referirse al mito griego de Psique (alma o mente) que representa un viaje iniciático a las profundidades del alma para conectar con el interior profundo de una mujer y desatar su potencial y su autoridad individual.
La iniciación se concluye cuando se reconoce que no hay autoridad externa que pueda asumir la sabiduría interior y cuando se acepta todo lo que se es.
Los retos de Psique
El mito cuenta que Psique debe enfrentar una serie de desafíos en su vida, de entre los cuales el más complicado acaso sea el impuesto por Afrodita (diosa de la belleza) que la obliga a viajar al Hades (inframundo) de donde debe volver con una caja que, en su interior, contenga un poco de belleza. Solo entonces, alcanzado ese objetivo, podrá recuperar el amor de Eros (dios del placer). Durante su travesía, confronta grandes retos que la empujan a asumir, en soledad, el control de sus decisiones, y solo la fuerza de su amor le permite encarar sus miedos. Una vez superadas las pruebas y a su regreso al mundo, Psique desobedece a Afrodita y abre la caja, cayendo en un sueño del que no puede volver. Eros la lleva frente a Zeus y le pide que les permita casarse, a lo que el dios del Olimpo responde despertándola y convirtiéndola en inmortal.
Psique es el inconsciente que dirige la vida de una persona. Descender y conectarse con esta realidad individual es vital para evaluar el pasado, así como para entender las causas que retienen a un individuo
Este mito muestra aspectos de Psique aplicables al desarrollo de cualquier niña en su camino a convertirse en una mujer autodirigida y segura de sí misma que atesore, en su interior, las herramientas que le permitan alcanzar su visión personal. Psique es, inicialmente, influenciada por su familia: su padre la obliga a casarse; su hermana la incita a asesinar a su esposo porque según ella es un monstruo. La diosa Afrodita le ordena, además, enfrentar pruebas imposibles para un humano, prometiéndole que al superarlas podrá alcanzar el amor que busca. Dicho amor significa la pasión canalizada para alcanzar los sueños del tipo que sean. A lo largo de cada una de las pruebas, están siempre presentes su voluntad y su pasión, que le permiten cumplir con las exigencias impuestas y adquirir, en el camino, la seguridad para enfrentar el reto más complejo de su vida: descender y volver del Hades.
Desarrollar lo Femenino
La historia de Psique es utilizada en psicología para referirse al desarrollo del aspecto femenino y las profundidades del inconsciente. Cada una de las pruebas, con su respectiva desobediencia, la llevan por un nuevo camino de búsquedas y aprendizajes que la impulsan a tomar decisiones en soledad y, en definitiva, la incitan a asumir la más difícil de sus osadías: desobedecer a la diosa Afrodita y abrir la caja; y a través de este hecho conquistar su autoridad interior.
Psique es el inconsciente que dirige la vida de una persona. Descender y conectarse con esta realidad individual es vital para evaluar el pasado, así como para entender las causas que retienen a un individuo. Y, desde ese íntimo lugar, volver a la superficie, abrir la caja y descubrir el enorme regalo de la aceptación total con lo bueno, lo malo, los aprendizajes y los dolores. Y para realizar, en el momento presente, los ajustes requeridos e iniciar un vuelo hacia el futuro libre de cargas y con la seguridad de estar en el camino correcto.
Este proceso se concluye, como señala Marlow, “por la decisión correcta en el momento correcto”, cuando se reconoce que no hay autoridad externa que pueda asumir la sabiduría interior y cuando “se emerge a través de la aceptación de todo lo que se es”. Este es el mito de Psique, la iniciación primordial en la vida de una mujer.